Podríamos decir que la historia empezó en el año 1972 cuando un grupo de vecinos inició las gestiones para conseguir un terreno fiscal ante la comunidad junto con un sacerdote de la Diócesis de San Miguel.
El 12 de abril de 1976 se colocó la piedra fundamental en el lugar conseguido que era la esquina de Corbeta Uruguay y Santa Marta, con la presencia del Padre Olegario Pascual, pero con el Golpe de Estado ocurrido en ese año, se debió entregar nuevamente al estado.
Luego la Parroquia San José Obrero adquiere el terreno en el que actualmente está la comunidad, con la colaboración de vecinos y del Padre José Luis Vendramín, en el mes de enero de 1977 y se comenzaron a reunir fondos para empezar con la construcción de la Capilla.
El 17 de junio de 1977 el Padre José Antonio Scocco presentó ante la comunidad los planos gentilmente elaborados por el Señor Julio Albarenga, Maestro mayor de obras. Es así que con los planos y los fondos recaudados en los bailes, comidas y rifas la comisión invitó a los vecinos a trabajar en la construcción del templo con los pocos elementos disponibles aportados en casi todos los casos por los vecinos. Mientras tanto, las Misas, los Bautismos y los casamientos se celebraban en las casas y las confirmaciones en María Bístrica.
En el año 1979 la obra cesó por falta de fondos, pero gracias al aporte de la Parroquia San José Obrero, en el año 1980 se pudo continuar y se colocó el techo y se hizo el contrapiso, sin ventanas e improvisando instalaciones. En ese mismo año se comenzaron las celebraciones de la Santa Misa con los Sacerdotes Misioneros de la Sagrada Familia.
En 1987, el Padre José María Aguirre con la construcción ya terminada, dio origen a las charlas de preparación para catequistas.
A lo largo de tantos años estuvimos acompañados por los Padres: Olegario Pascual, José María Aguirre, José Antonio Scocco, Víctor Hugo Zinni, Raúl Vera y Gustavo Manrique, como así también por el Diácono Manuel Roldán.
Fue el Padre Hugo Zinni que soño con un proyecto más ambicioso y la construcción del templo actual. Generó un proyecto con el arquitecto Salvador y comenzó la obra. Debido a que lo trasladaron no pudo continuar la obra.
Ya en el año 2016 el Obispo de San Miguel, Sergio Fenoy, decidió eregir la Cuasi Parroquia Nuestra Señora de América el 12 de marzo, nombrando administrador parroquial al Padre Rodrigo Aguilar, actual párroco.
Con el título de Parroquia, a partir del 24 de diciembre de 2017, la comunidad, con su párroco, y la ayuda de muchísimas personas generosas, se logró terminar el templo y los salones parroquiales actuales.